Alfonso de Urbina Arróspide
La MEMORIA HISTÓRICA es una de las grandes industrias del Régimen, empezó a diseñarse el 11 de marzo de 2004, se implantó durante los Gobiernos de Zapatero y ahora recibe el empujón definitivo
Este Régimen vive de inventar y desarrollar nuevas industrias. En el País Vasco y Cataluña la industria del nacionalismo produce grandes beneficios, y en Andalucía el Régimen fomentó la industria del paro, que supuso una gigantesca fuente de ingresos para el aparato socialista y sus asociados. La industria de las adjudicaciones del B.O.E., planes urbanísticos de los Ayuntamientos y concesiones autonómicas es una gran industria implantada en toda España.
La Memoria Histórica tiene como materia prima el pasado, pero es la gran industria del futuro.